Un Blog de Elizabeth Conte Chassin-Trubert

martes, 28 de agosto de 2012

NOSTALGIA DEL PRESENTE




NOSTALGIA DEL PRESENTE



Miguel Ángel Fernández. Fotógrafo español. Faro, Islandia




En aquel preciso momento el hombre se dijo:
Qué no daría yo por la dicha
de estar a tu lado en Islandia
bajo el gran día inmóvil
y de compartir el ahora
como se comparte la música
o el sabor de una fruta.
En aquel preciso momento
el hombre estaba junto a ella en Islandia.



De: La cifra, 1981



Jorge Luis Borges


viernes, 24 de agosto de 2012

HAIKÚ


SUSANA BOMBAL



SUSANA BOMBAL





Julio Romero de Torres, pintor español (1874 - 1930) -Mujer sentada en el jardín




Alta en la tarde, altiva y alabada,
cruza el casto jardín y está en la exacta
luz del instante irreversible y puro
que nos da este jardín y la alta imagen
silenciosa. La veo aquí y ahora,
pero también la veo en un antiguo
crepúsculo de Ur de los Caldeos
o descendiendo por las lentas gradas
de un templo, que es innumerable polvo
del planeta y que fue piedra y soberbia,
o descifrando el mágico alfabeto
de las estrellas de otras latitudes
o aspirando una rosa en Inglaterra.
Está donde haya música, en el leve
azul, en el hexámetro del griego,
en nuestras soledades que la buscan,
en el espejo de agua de la fuente,
en el mármol del tiempo, en una espada,
en la serenidad de una terraza
que divisa ponientes y jardines.

Y detrás de los mitos y las máscaras,
el alma, que está sola.

Buenos Aires, 3 de noviembre de 1970





Jorge Luis Borges




De: El oro de los tigres (1972)

sábado, 18 de agosto de 2012

EL INSTANTE




EL INSTANTE


Michel Kenna (1953). Fotógrafo inglés. House on Water, Atlanterhavsveien, Norway, 2008



¿Dónde estarán los siglos, dónde el sueño
de espadas que los tártaros soñaron,
dónde los fuertes muros que allanaron,
dónde el Árbol de Adán y el otro Leño?
El presente está solo. La memoria
erige el tiempo. Sucesión y engaño
es la rutina del reloj. El año
no es menos vano que la vana historia.
Entre el alba y la noche hay un abismo
de agonías, de luces, de cuidados;
el rostro que se mira en los gastados
espejos de la noche no es el mismo.
El hoy fugaz es tenue y es eterno;
otro Cielo no esperes, ni otro Infierno.



De: el otro, el mismo (1964)



Jorge Luis Borges

miércoles, 8 de agosto de 2012

JORGE LUIS BORGES





…Mi único destino posible , es el destino literario. Porque evidentemente, un hombre que ha cometido la imprudencia de cumplir ochenta y cuatro años, que en cualquier momento  cumple ochenta y cinco, que está ciego; bueno, la mayoría de mis contemporáneos se han muerto, aunque como usted ve, hay personas jóvenes alrededor de mi vejez. Bueno, yo paso alguna parte de mi tiempo solo, y entonces lo pueblo con proyectos. Por ejemplo, esta mañana me desperté a las siete, yo sabía que iban a llamarme a las ocho y media. Yo pensé, bueno, vamos a aprovechar este tiempo, y empecé a borronear, mentalmente, se entiende, un soneto; que dentro de unos días será realmente un soneto. Ahora es un mero borrador. Es decir que yo paso buena parte de mi tiempo solo, y tengo que poblarlo con proyectos, con fantasmas, podemos decir, salvo que suena un poco terrorífico, impresionante, ¿no?, además, no me siento perseguido por ellos, son gratos fantasmas.



Texto tomado del libro “Reencuentro. Diálogos inéditos”. Con Osvaldo Ferrari. Editorial Sudamericana.

martes, 7 de agosto de 2012

EL SUEÑO




EL SUEÑO


Johannes Vermeer van Delft (1632-1675). Pintor neerlandés.



La noche nos impone su tarea
mágica. Destejer el universo,
las ramificaciones infinitas
de efectos y de causas, que se pierden
en ese vértigo sin fondo, el tiempo.
La noche quiere que esta noche olvides
tu nombre, tus mayores y tu sangre,
cada palabra humana y cada lágrima,
lo que pudo enseñarte la vigilia,
el ilusorio punto de los geómetras,
la línea, el plano, el cubo, la pirámide,
el cilindro, la esfera, el mar, las olas,
tu mejilla en la almohada, la frescura
de la sábana nueva, los jardines,
los imperios, los Césares y Shakespeare
y lo que es más difícil, lo que amas.
Curiosamente, una pastilla puede
borrar el cosmos y erigir el caos.



De: La cifra (1981)



Jorge Luis Borges